Año Nuevo · El Correveydile de Audiodrama.es

Cuando comienza un año cabría preguntarse: "¿por qué, el año que viene, no ha venido?" “Comienza, ¿para qué?” “¿Por qué no lo ha hecho antes?”

Es el futuro, que desplaza al presente. Lo arroja al sumidero del pretérito. Esto lo descubrió, en su momento, el Tiempo. No para desde entonces. Intenta detenerse a descansar y el tiempo que lo sigue no le deja. Es la masa del Tiempo, que ocupa la totalidad de los espacios, pero sólo un instante inapreciable: según llega (¿de dónde?) el Tiempo ya se ha ido. Aquí, y donde está usted. Al mismo tiempo. Pero, ¿dónde está el tiempo? Hablemos del espacio.

Estaba, y está, aquí.

"Aquí" es "ayer", "mañana" o hace un rato. ¿O es que mañana "aquí" no será "aquí"? ¿Acaso no es aquí donde ahora estamos y acaso no lo era hace una hora? "Aquí" también ocupa el Tiempo en toda su extensión. "Aquí" recorre el Tiempo del principio hasta el fin. Puede que aquí, antes de que la Tierra se crease, sólo hubiera un vacío y que el futuro depare a este lugar un destino peor, pero ocurrirá "aquí" y, lo que sucedió "aquí", "aquí" ha pasado. Una mínima ración de coherencia exige para el Tiempo espacios infinitos que pueda rellenar en toda su extensión y tiempos infinitos que ocupen por completo esos espacios. En los que no está usted. Usted sólo es usted en otra dimensión que el tiempo, que se fue con ella, se ha llevado.

Texto e imagen: Federico Volpini



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