Trabajó con Olmedo, Palito y Migré, brilla en radioteatro y eligió Mar del Plata para continuar su carrera que lleva 75 años: la historia de Miguel Jordán
Miguel Jordán es un referente de la actuación. De sus comienzos en el radioteatro a su actualidad en el círculo independiente local, el actor repasa su carrera en diálogo con 0223.
Llega con la simpleza y el perfil bajo que caracteriza a los grandes artistas. Acompañado por su compañero de elenco, Mariano Fernández y su agente de prensa, Miguel Jordán saludo y aguarda en silencio mientras se disponen las comodidades para el desarrollo de la entrevista que en principio tiene como objetivo promocionar la obra “Mi padre” con la que realizará temporada desde el 5 de enero en el teatro La Bancaria.
“Mar del Plata es maravillosa, siempre me ha recibido muy bien”, dice el hombre que descubrió que lo suyo era la actuación cuando era un niño y que esta temporada celebra sus 76 años de trayectoria.
"La primera vez que vine a Mar del Plata fue hace 50 años", recuerda al tiempo que repasa que la primer obra fue una adaptación de un programa que hacían en canal siete", dice. "Hice temporadas que fueron éxitos y también la peleé eh", agrega.
Según recuerda Jordán, las temporadas en la ciudad eran -y aclara que siguen siendo- “las mejores”, aunque reconoce que ha cambiado el ritmo de vida y sostiene que decidió radicarse en la ciudad luego de hacer temporada con “Las heridas del viento”, obra que lo reencontró con el público local.
"Después vine con Carmen Flores a hacer temporada con obras españolas y también con Pepe Soriano hice La Nona en teatro. Mi personaje era el pretendiente que recordaba a Catanzaro", recuerda con una sonrisa
Si hay algo que lo distingue es la continuidad y el profesionalismo. Si bien su carrera tuvo más obras de comedia que de drama, hizo cuánto papel le ofrecieron y consideró que podía interpretar con dignidad, “Había comprado un departamento, entonces me decían tal papel y lo leia y decía “vamos” o me decían, una película o una novela y agarraba”, dice entre risas mientras reconoce que si le dan a elegir un género, prefiere el radioteatro.
Los primeros recuerdos que tiene el actor de “Una voz en el teléfono” son a los diez años cuando su abuelo lo llevaba al teatro a ver a las figuras del momento. Fue en esa ápoca que el mismo Discépolo aprobó su ingreso al elenco infantil de Radio El Mundo con la aprobación de sus padres y, desde entonces no paró.
Años más tarde, le comunicaría a sus padres que no se inclinaría por la profesión de Contador Público, como ellos querían sino que estudiaría actuación “Gracias a Dios tuve el apoyo de mi familia siempre”, dice. Entonces comenzó a estudiar y se encontró con un profesor que les dijo una frase que lo marcó para siempre. “A una función se falta únicamente si me traen el certificado de defunción”, cuenta.
Los primeros trabajos no tardaron en llegar. Su primer gran trabajo en el escenario fue “La señora ministra de Zaldívar”, sus padres, por supuesto fueron a ver de qué se trataba lo que consideraban una aventura de su hijo y luego de ver la puesta decidieron seguir apoyándolo con las clases de actuación. “Estudié mucho. Estuve con Humberto Serrano, Agustín Alezzo, trabajé bastante", dice.
A lo largo de su carrera Jordán hizo “de todo” Desde trabajar con el recordado Alfredo Alcón a ser parte de un capítulo de “Casados con hijos” o participar de las películas de Olmedo y Porcel y Palito Ortega. Pero siempre reconoce que encuentra la felicidad en el teatro y el radioteatro y, en Mar del Plata encontró un grupo de aficionados al género que le permitió desarrollarse en este género que lo tuvo como protagonista en su época dorada.
"Lo que más me gusta es trabajar", asegura el actor que en esta nueva temporada celebrará sus 76 años de profesión y cierra contundente: "El teatro es la fuente más importante que tenemos los actores", cierra.
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